Memo 18: Miguel Angel es dueño del taller automotor “Los Angeles”. Su aporte para mi investigación es trascendental, ya que me permitió visitar su lugar de trabajo para obtener algunas imágenes de los autos que tiene en reparación. El resultado es interesante porque pude ver absolutamente todo. Dentro de los autos polarizados encontré: sin ninguna oblea, con todas las obleas, y lo que más me llamó la atención: autos con obleas en el parabrisa y no en los vidrios laterales (laminados) como debería ser.

Cuando le pregunté a Miguel si conocía el motivo por el cuál estos autos no estaban en regla, se puso a si mismo como ejemplo. El tiene dos autos particulares en su taller: un Honda accord modelo 2011 polarizado, con todas las obleas correspondientes. Y una chata que utiliza para ir a buscar los repuestos también polarizada. Esta última no tiene las obleas a pesar de que pasa mayor tiempo en la calle. Y el análisis de Miguel fue el siguiente: “Si me ven con ese auto (Accord) sin las obleas me van a querer sacar plata. Con el otro digo que lo uso para trabajar en el taller, y con algunas excusas me es más facil explicar porque no tiene las obleas y zafo ”. Definitivamente la gente tampoco tiene muchas ganas de cumplir con la ley. Y hasta al mismo Miguel el auto se lo polarizó un joven que trabaja para él, y luego adquirió las obleas por un conocido.