Memos

Memo 4: Llegó el momento de mi primera entrevista con Hugo Ringel, en su local de polarizados el autoradio Solar black, ubicado en calle Pellegrini y Cafferata. Las preguntas apuntaron pura y exclusivamente a todas las cuestiones que pretendía sacar a la luz en la investigación. Sabia que no debía increparlo en el interrogatorio, porque el es quien va a llevar adelante mi investigación confirmando o refutando cada dato que vaya recolectando con los distintos actores de este trabajo. Hugo defendió obviamente la sanción de esta ordenanza, a pesar de que según él esto implica una perdida de dinero para su local. Dijo que no había posibilidad de que con esta nueva metodología haya trabajo en negro o no registrado por parte de polarizadores particulares, y negó que esto pueda ser un beneficio para el municipio o algún particular.
Trato de despegarse de la idea de que esta nueva ordenanza va en contra de la ley Nacional y advirtió que esto debía ser un disparador para que toda la Argentina imite esta conducta y apruebe la colocación de polarizados. Según él todo es utópico en el marco de esta nueva ley, entonces a pesar de irme disconforme con sus respuestas se que la próxima vez que lo entreviste será con testimonios que refuten gran parte de lo que el da por excelente.

Memo 5: Días después de la entrevista, una fuente me comentó que varios allegados tienen materiales y elementos como para poder colocar un polarizado en cualquier garaje de la ciudad, sin ningún tipo de inconvenientes. Y que si yo con ese mismo polarizado colocado por una persona no registrada, acudía a colocar la oblea nadie me diría que no. Por supuesto que esto no burla solo a las casas de polarizado registradas por el municipio, sino también a otros sectores. Aquí entra en juego la complicidad entre quienes distribuyen los materiales, los particulares y las ganancias no declaradas de ambos.
Pero todavía estaba dudando de cómo encarar a alguien que se mantiene oculto en este rubro, para que me diera la información y las pruebas necesarias como para empezar a dar formato a la resolución de mi hipótesis. Tenía la sensación de que para llegar a eso primero debía buscar fuentes oficiales del gobierno de la ciudad, y también de los talleres encargados de aprobar la revisión técnica vehicular con el filtro solar incluido. Mi próximo objetivo era poner al tanto al edil Jorge Boasso de que quería entrevistarlo y porque cuestión, para saber si tenía predisposición para hablar de este tema o sería esquivo.

Memo 6: En la semana siguiente ocurrieron algunas cuestiones puntuales que alimentaron mis incógnitas sobre la investigación. Por una parte me dedique a observar cuantos autos polarizados tenían las obleas correspondientes, y el número fue cero. Entonces consulté a algunos de los dueños de los vehículos, y ninguno me supo explicar porque aún no habían regularizado su situación y aludían que nadie les exigía tampoco. Entonces más allá del trabajo no registrado dentro de este rubro, las contradicciones entre ordenanza municipal y ley nacional, etc. Me pregunté: ¿para qué se sanciona algo qué después no se va a controlar?
Pocos días después me comunique por correo electrónico con Jorge Boasso para solicitarle una entrevista con el fin de hablar acerca de esta cuestión, y la respuesta fue inmediata. La predisposición fue absoluta, y me pidió que le dejara un número para que el se contacte conmigo lo antes posible, por supuesto conteste inmediatamente con mi teléfono particular y celular. Aún estoy esperando el llamado del edil y parece que si no vuelvo a buscarlo yo la cuestión quedará en la nada misma.